lunes, diciembre 24, 2007

Poesía

"I don't have a hair goal and that saddens me. Lately I have been wearing it wavy and letting it be who it is, but I need more products. Maybe my hair goal will be something like Charlie's Angel's era Drew Barrymore with the long curly waves. Is that unrealistic? I want Botticelli hair! I want to wake up with cherubs flying around me and harps playing!"

pretty crabby

jueves, diciembre 20, 2007

Album Familiar

AuraRecortable copy

A 45 RPM! Cinco de Mayo


Posted by




9. War (1982) You got The power/ Cinco de Mayo.

Buenas de nuevo. Aquí tenemos una de esas canciones destinadas a dinamitar una pista de baile. A mi me lo parece, vamos. Cinco de Mayo de los War es tema favorito de la autora de este blog, y del regente de uno de los locales donde pincho, es el típico tema que cuando suena viene la gente a preguntar de qué se trata. No me extraña por otra parte, ese aire latino conducido por un ritmo disco, ciertos arreglos de sintetizadores que nos delatan que nos encontramos ya en los ochenta, y en definitiva, todo un hit realizado precisamente por uno de los combos más exitosos del podríamos llamarlo, funk-rock.

Porque War es uno de los grupos más influyentes de su época: la gente del Hip-Hop lo tiene como uno de sus grupos de referencia, fragmentos de sus temas han sido sampleados hasta la saciedad, y versionados por gente que va desde Korn hasta Janet Jackson, pasando por TLC o Smash Mouth. Con unos cuantos éxitos en los setenta, empezaron como grupo de acompañamiento de Eric Burdon, para, tras cosa de tres años seguir sin él editando como digo temazos tan conocidos y bailados como The Cisco Kid, The World Is A Guetto, Deliver The World o el tema que nos ocupa.

Hablemos ahora de cuestiones memorabilísticas. La copia en cuestión se trata de un ejemplar promo y la portada, como podéis ver es absolutamente desafiante. También llama la atención, aunque era muy común en la época de publicación, la inscripción repetida Dance Music con lo que el avispado que lo adquiría sabía a lo que iba. Siempre me han hecho gracia estas cosas, otra variación de ese tipo de reclamo solía ser la inscripción Especial Discotecas.

Se lo pillé al argentino malhumorado del que os hablaba en el anterior post, un día que el que suscribe estaba muy triste. Y, un poco por casualidad, y un poco con cierta intención, pude ir atesorando unos cuantos singles más de este grupo, e incluso un par de LPs. Huelga decir, que este tipo de sonido, también representado por bandas como Mandrill, Tower of Power o los muy exitosos Chicago me encanta, ya que tiene el punto justo de mala baba y es bailongo a tope. Huelga decir también que después de esta adquisición, un servidor ya no estaba tan triste.

Espero que les guste.

Fran le Kinky


martes, diciembre 18, 2007

Et Mourir de Plaisir (1960)

Si las películas de Roger Vadim habitualmente se presentan al espectador como un artículo de lujo, envuelto en celofanes, Et Mourir de Plaisir no es una excepción. Esta película de vampiras, inspirada en “Carmilla” de Sheridan Le Fanu (no sé cuantas adaptaciones llevo ya reseñadas de este relato) se caracteriza por ser un producto estético de factura casi perfecta. Influenciada por los terrores Hammer del país vecino, esta producción franco-italiana cuenta con una serie de elementos que la convierten en una obra de inaudita belleza.

Por un lado están las localizaciones campestres de ensueño, aprovechando al máximo las posibilidades de la Villa_Adriana, que se encuentra en las afueras de Tívoli. Un paraíso pastoril fotografiado en preciosistas tonos por Claude Renoir. Por otro lado, el vestuario es obra del diseñador Marcel Escoffier, que envuelve a las bellezas del film en gasas y telas vaporosas con vestidos de fantasía. El arpa de Elene Polonska transporta desde los títulos de crédito al voluntario viajero a mundos donde el ideal se materializa en sueños quiméricos, dentro de la banda sonora compuesta por Jean Prodromidès

Pero el artificio no estaría completo sin la presencia de una majestuosa vampiro, por una dama a la que no podríamos negarle el ofrecerle nuestro líquido vital para su capricho. Y en este caso se trata de una vampira muy bella. Annette Vadim era la mujer de Vadim por aquel entonces, una rubia con cierto parecido a la Bardot pero con un aire más frágil. Modelo danesa, apenas hizo una decena de películas ya que su carrera como actriz estuvo siempre ligada al cineasta francés, y su relación amorosa fue muy breve. Pero su presencia en “Et Mourir de Plaisir” es realmente estimulante, algunos planos de su rostro son casi imposibles de sostener y su cuerpo torneado se perfila estupendo entre paisajes de tumbas y criptas abandonadas, vestida de blanco.

La historia no deja de ser un triangulo amoroso romántico, con el leitmotiv de las rosas y la sangre como elementos simbólicos. Se comentó en su momento el tratamiento lésbico que da Vadim a la relación entre Annette Vadim (Carmilla) y Elsa Martinelli (Georgia) y es cierto que la atracción física entre ambas es evidente desde un primer momento e incluso está el conocido beso que inmortalizó para siempre la película en fotografías y carteles, pero no esperen escenas de dormitorio, ya que el affaire se queda en una insinuación bastante discreta. Lo que sí es curioso es que Vadim da un tratamiento mucho más amable a ambas mujeres que al personaje que interpreta Mel Ferrer (Leopoldo), que se hace ciertamente antipático, y cuyo peso argumental es bastante pobre.

“Blood and Roses” es otra de esas películas de vampiros con un ritmo de narración lento y con algunos fragmentos oníricos de los que tanto me placen. Como les dije al principio, una joya envuelta, lista para ser regalada.

jueves, diciembre 13, 2007

Album Familiar

CoplillasRumasa

Cassette comprado a un euro en una liquidación de cintas de Discos Edison´s. Por su gran impacto visual, su rompedor diseño y un lema del que muchos tendrían que aprender, ha pasado a formar parte de mi colección de tesoros.
El contenido musical lo dejo a su perversa imaginación.

Y el bicho chupa que chupa...

miércoles, diciembre 12, 2007

Alexandre Dumas. Crímenes Célebres

Entre la inabarcable obra literaria de Dumas (padre) su colección de relatos basados en famosos crímenes históricos ocupan un interesante lugar dentro de su producción fantástica.

Dumas gustaba de recopilar documentación para estas historias sobre crímenes truculentos que tanto debían complacer a los lectores, sedientos de horror, en pleno romanticismo. No escatimaba en detallar torturas, escenas sangrientas o indagar en la maldad insondable de la mente criminal: el corazón humano, y la infinita variedad de sus delitos de sangre.

Valdemar ha recogido en un tomo de su colección “Gótica” tres de los “Crímenes Célebres” de Alexandre Dumas. El primero “La marquesa de Brinvilliers” narra la vida de esta aristócrata del siglo XVII que junto a su amante llegó a envenenar a decenas de personas, incluyendo a su padre y a sus dos hermanos, con una extremada sangre fría. El relato, que describe los numerosos envenenamientos de la marquesa (se cuenta que probaba sus pócimas en los enfermos de los hospitales), se adentra también en el proceso judicial que la llevó al cadalso y las torturas que le fueron inflingidas hasta el momento de la decapitación, mostrando la singular entereza de esta dama ante la brutalidad y la barbarie.

Urbano Grandier” detalla los procesos judiciales por los que se acusó injustamente al cura de Loudun de haber hecho un pacto con el demonio para que poseyera a las monjas del convento de las ursulinas. Las monjas, enamoradas de la belleza de Urbano Grandier y habiendo sido rechazadas por él, aceptaron escenificar la farsa que condujo al sacerdote a torturas extraordinarias y a ser quemado públicamente en la hoguera.

Vaninka” es el último de los relatos y el más romántico en el sentido contemporáneo del concepto. Una bella aristócrata mata por accidente a su amante dejándolo encerrado en un arcón de su dormitorio. Uno de los criados junto a su doncella encubren el delito, pero Vaninka vive torturada por los recuerdos y cuando al final del relato la protagonista es descubierta, decide ingresar en un convento.

Les dejo este fragmento exquisito de “La marquesa de Brinvilliers” que podría subtitularse “del asesinato considerado como una de las bellas artes”:

“Entonces fue cuando la marquesa se armó con aquella terrible impasibilidad de que ya hemos hablado, no apartándose ni un instante de su padre, durmiendo en un cuarto contiguo al suyo, comiendo con él, y abrumándole con su esmero, sus caricias y agasajos, hasta el punto de no querer que nadie más que ella le sirviese. Era necesario, en medio de sus infames proyectos, presentar un rostro risueño, franco y abierto, en el que el ojo más suspicaz no pudiese leer más que ternura y amor o respeto. Con esta máscara presentó una noche un caldo envenenado a monsieur d’Aubray. Éste lo cogió de sus manos, y ella vio cómo se lo acercaba a la boca, siguió al veneno con los ojos hasta su pecho, y ningún gesto hizo patente en aquel rostro de bronce la terrible ansiedad que debía oprimirle el corazón. Y luego, cuando monsieur d’Aubray hubo tomado toda la bebida, recibió sin temblar la taza en el plato que le presentaba, retirándose a su cuarto para aguardar y escuchar”

lunes, diciembre 10, 2007

A 45 RPM! Mi pasión por los singles. J'ai Mis Un Tigre Dans Ma Guitare

Posted By



Bueno, con este título inicio una pequeña serie de posts donde hablaré de una de mis pasiones: el coleccionismo de singles. La idea es introducirles de una manera personal en este mundo fetichista y para algunos obsoleto y luego hablarles de mis piezas favoritas, con derecho a escucha of course. Espero que les guste.

La verdad es que no se por donde empezar.

Siempre me llamaron la atención esos plafones con disquitos que colocan en los puestecitos de La Fira del Disc. Los expositores suelen ubicar ahí sus piezas más raras: singles muy buscados y generalmente muy caros. Forman unos mosaicos multicolores realmente vistosos y cumplen realmente su cometido: acercarte a echar un vistazo. Eso me encanta, una cubeta de singles dispuesta a ser explorada; los dedos se mueven ávidos y ágiles y de vez en cuando detienes tu ritual: has encontrado algo. Lo apartas, miras el estado del vinilo y te prometes un pequeño festín. Es una pieza que llevabas tiempo buscando, o es un disco del que habías oído hablar pero nunca lo habías visto, o (mejor aún) es algo que no estás seguro de qué se trata pero te da buenas vibraciones. Muchas emociones en poco tiempo.

Porque es emocionante. Y no sólo (afortunadamente para nuestros bolsillos) está la Fira del Disc. Tenemos nuestros sitios de búsqueda de vinilitos. Quizá me inicié en el Mercat de les Antiguitats i Col·lecionisme que se celebra una vez al mes en mi ciudad. Allí había un señor que traía bastantes cositas de Los Bravos, Los Brincos y hasta algún LP interesante. Por muy resacoso que estuviera ese sábado siempre tenía el momento. Pasado el tiempo el tipo dejó de venir. Pero la fiebre había comenzado...

El "otro" sitio importante para mi es el Mercat de Sant Antoni. Otra vez la resaca, o el reservarse la noche anterior, y me acerco a Barcelona esos domingos imposibles. Hay varios puestos interesantes y aquí sobre todo se pueden encontrar discos de soul setentero tirando a disco, y a veces verdaderas joyas, como como el disco de Eurogrup o el de Electric Machine (este se lo regalé a Aura). Recuerdo un día glorioso con un puesto de todo a dos euros, la de cosas bizarras que llegué a encontrar.

Los otros dos puestos que visito con frecuencia, son el mercadillo que ponen los jueves en la Plaza de La Catedral y otro que ponen por Colón los domingos. En el primero un señor con voz de Constantino Romero te trata amablemente mientras ojeas el material y en el segundo un argentino (o uruguayo) con malas pulgas trata de espantar a los guiris que sólo vienen a mirar entonando los temas de los Beatles (o los Rolling Stones) que suenan en su radiocassette.

En menor medida también miro la cubeta de los singles de Discos Daily para ver las reediciones (y algún goloso original) de reggae y de soul que trae Roger. Estoy seguro de que en el almacén guarda cosas mejores para DJ's de renombre y coleguitas (Roger, si me estás leyendo, esto es medio broma para aumentar el dramatismo y la emoción de la acción).

También es muy interesante la sección de singles de Funk que tiene la tienda por correo de Chicago Dusty Groove. Aquí sólo he pedido una vez. Eso sí, lo que me llegó era maná del cielo.

Porque es precisamente eso, puritito maná para disckjockeys y melómanos, el hecho tan bonito y tan pop de que, si una canción nos gusta podemos tenerla: poseerla, y con un formato de los más atractivo. No me negarán que formalmente un single es una cosa bella, el disco así tan cuco, y la portada, con sus grafismos y sus colores...Y si no tiene portada, ese sobre con el agujero redondo donde se puede ver la galleta, y que a veces viene con dibujos alusivos a la marca. Gloriosos son los singles de la Trojan de mediados de los 70 donde se ve un guerrero griego (o más propiamente troyano) y la galleta del disco hace las veces de escudo.

Esta forma de consumir y acumular música quizá ha caído en desuso, pero vuelve de una manera diferente con las descargas de MP3, eso si, de una manera más etérea. No es lo mismo. El uso de CD-single parece mucho más minoritario (al tiempo...) y... ¿Ustedes se acuerdan de los cassettes-singles? Yo sí.

Uno de mis mayores placeres es lo que yo llamo ponerme "filas de singles", coger y en mi cuarto ponerme un disco tras otro, mientras va transcurriendo la mañana. El otro placer relacionado, es evidentemente ponerlos por los sitios para los amigos y parroquianos del lugar. Porque compartir música es una de las cosas más bonitas del mundo.

Y bueno, ya les he hablado de las pulsiones y las pasiones que van relacionadas con esta afición mía. Ahora, como dije antes, y en los próximos días (la regularidad la marcará mi amiga Aura) haré una selección de mis diez piezas más preciadas. Me va a costar un montón seleccionar sólo diez discos pero me divertiré haciéndolo.

10. Jacques Dutronc (1966) Et moi, et moi, et moi / J'ai mis un tigre dans ma guitare/ Mini-mini-mini/Les gens sont fous, les temps sons flous. Vogue

A este señor lo descubrí en una de esas cintas que hacía Eneida, la organizadora del Magic in The Air Club, evento mod de Barcelona, hará cosa de diez años. Siempre me llamó la atención su manera desenvuelta de cantar, muy chulesca y hasta divertida. ¡Y como sonaban las guitarras! Puro sonido Beat. Entre la parroquia mod triunfa el tema Le Responsable pero para mí su must absoluto es quizá el menos conocido jai mis un tigre dans ma guitare, un dinámico y casi funkero ritmo de batería da pie a un riff guitarrero que invita al baile. Quizá recuerde a los Beatles de Taxman, que a su vez se miraban en el espejo del sonido Stax o motown. Es uno de esos temas que te alegran el día, y, como he dicho antes, a la hora de pincharlo es realmente efectivo. Recuerdo mi paso por el Wipeout Weekend cuando la pinché y un amanerado mod (francés para más INRI) de pantalones blancos se esforzaba y desataba con sus piruetas y vueltas...

El artefacto lo pillé en la fira del disc del Festival de Blues de Cerdanyola. Ésta se me olvidó mencionarla pero también es interesante lo que se encuentra. Además mientras, suena música en directo.

Consultando en esta web he descubierto que éste es el primer EP que sacó Jacques Dutronc, y los siguientes también están muy bien, unos en la misma línea y otros más en el tema de la canción protesta. Yo a este le tengo mucho cariño. A ver que opinan ustedes...

Fran le Kinky


viernes, diciembre 07, 2007

Flirt Neoplatónico

"La mitad de la belleza depende del paisaje, y la otra mitad del hombre que lo mira"
Lin Yutang

No (y digo no a todo lo que la frase de arriba es). La belleza no está partida, sale del paisaje y sale del que mira, como un cordón invisible que atenaza la realidad con sus hilos espirituales. La belleza yace en el fondo de todo, pura entre las aguas pantanosas de la realidad sensorial. Luce entre sus barros y entre sus destellos por igual, porque es el rayo que iguala todas las cosas desde el cielo.

Hace un par de siglos del poema “Una Carroña” de Baudelaire, y seguro que muchos aún se escandalizarían ante la imagen de belleza de la enfermedad, de la belleza del cadáver. La belleza. Como si no fuera belleza. Como si algo andara mal. Creo que la verdadera perversidad consiste en no encontrar belleza ahí, en negar la vida, al fin y al cabo. Cortar ese hilo que liga todas las almas y ver el mal donde sólo estamos nosotros. Porque no hay maldad ahí. Sólo hermosura. El brillo inefable transparentándose en fulgores de fuegos fatuos. La sangre ardiendo. El vapor anegando la atmósfera. Respira. Palpita. Se muestra. Se hace y se deshace. Está inmóvil y sin embargo en movimiento.

La belleza es la fiera o es la entraña. Es la piedra enterrada entre escombros. Es la llaga. Me envuelve y me atraviesa en corrientes eléctricas y me descubre el manto azulado que cubre todas las cosas. También lo descorre, y me enfrento a las formas desnudas, y entonces me ciego y pierdo el control del deseo. Pero está.

Latente. En la intersección de ambos cuerpos. Por eso creo, porque amo.

Una carroña

Recuerda el objeto que vimos, alma mía,
aquella bella mañana de verano tan dulce:
al torcer de un sendero una carroña infame
sobre una cama sembrada de guijarros,

las piernas al aire, como una mujer lúbrica,
ardiente y sudando los venenos,
abría de una manera descuidada y cínica
su vientre lleno de exhalaciones.

El sol brillaba sobre esta podredumbre,
como para cocerla a punto,
y de rendir al céntuplo a la gran Naturaleza
todo esto que al mismo tiempo había unido.

Y el cielo miraba el esqueleto soberbio
como una flor abrirse.
El hedor era tan fuerte, que en la hierba
te creíste desmayar.

Las moscas zumbaban sobre este vientre pútrido,
de donde salían negros batallones
de larvas, que se deslizaban como un espeso líquido
a lo largo de estos viventes harapos.

Todo aquello descendía, subía como una ola,
o se lanzaba chispeante;
se habría dicho que el cuerpo, hinchado de un aliento vago,
vivía multiplicándose.

Y este mundo comportaba una extraña música,
como el agua corriente y el viento,
o el grano que un aventador de un movimiento rítmico
agita y devuelve a su harnero.

Y las formas se borraban y sólo eran un sueño,
un esbozo lento en venir,
sobre la tela olvidada, y que el artista acaba
solamente para el recuerdo.

Detrás de las rocas una perra inquieta
nos miraba con aire enojado,
espiando el momento de recuperar del esqueleto
el trozo que había abandonado.

_Y, por tanto, tú eres parecida a esta porquería,
a esta horrible infección,
estrella de mis ojos, sol de mi naturaleza,
tú, mi ángel y mi pasión.

¡Sí! tal serás, oh, reina de las gracias,
despues de los últimos sacramentos,
cuando irás bajo la hierba y las floraciones grasas,
a enmohecer entre las osamentas.

Entonces, ¡oh, mi belleza! dile al gusano
que te comerá a besos,
que he guardado la forma y la esencia divina
de mis amores descompuestos.

miércoles, diciembre 05, 2007

No es Oro todo lo que Reluce

por el Javi,

el Javi

Todo empezó un martes por la noche. Estaba en mi casa cortando jamón para el bocadillo de la faena (hay que ganar dinero) y me puse… ¡a ver que dan en la tele! La serie esa del Emilio Aragón.

La escena era en la cocina, como de costumbre (la comida es importante) y se veía al abuelo, que anda que no he visto yo películas de ese hombre, y al nieto, también llamado Chechu. Y me di cuenta, no sé yo, que le decía unas cosas el abuelo al nieto como un poco sospechosas. O sea… que estaba ahí el abuelo sentado, o sea, que era como Calígula el abuelo.

Y el nieto ahí aceptando lo que le venía encima:

-¡Chechu!, ¿quién te quiere más que tu abuelo? Ven aquí que te achuche.

Vaya abuelo. Yo que tenía idolatrado al abuelo de Heidi, que hacía sus tostadas de queso fundido, que lo comían en plan ñam ñam. Anda que no me daban a mí ganas de comer.

Ahora me he puesto unas aceitunas. Bueno, resumiendo, que estas relaciones familiares que salen en televisión no son muy sanas. Hala. Me acuerdo yo de mi abuelo que me llevaba a la huevería, vestidos los dos de negro, que me enseñó a fumar (el tabaco es importante).

Punto y aparte. Y a este Chechu el jodido es que parece que le gusta y todo, que anda siempre detrás del abuelo como para pedirle una pizza de “Casa Tarradellas”, que cutre, eso no es ni comida ni nada. Le enseñaba yo al abuelo ese a hacer unos calamares rebozados con cerveza, que están más tiernos.

Y digo yo. ¿Y si me voy a una marisquería? Bueno, ¿qué estaba diciendo? Que me he ido con la sepia. Que para los niños no es bueno que vean esas cosas en la tele, es como si pusieran ahí en la serie a un tío jugando con las máquinas tragaperras.

Que no digo yo que yo no lo hago, pero no voy a hacer un corto de eso… o sí.

Para finalizar les recomiendo que vean “Médico de Familia” en una pantalla plana, es una ventana al mundo.

Ya está.

lunes, diciembre 03, 2007

Actriz Fetiche: Olivia Pascal.

La primera vez que vi a Olivia fue en “Interno di un convento”, una de esas películas que bien podría haber reseñado (lo dejo como pendiente) de Walerian Borowczyk. Director fetiche, película fetiche y actriz fetiche. Cacé el film por casualidad hace muchos años ya en un ciclo de TV que, si no recuerdo mal, se llamaba “Cine de Medianoche” en el que le tenían cierto cariño a Borowczyk y a sus peliculitas eróticas. Recuerdo haber visto también alguna de Tinto Brass e “Histoire d'O” a temprana edad, pero esa es otra historia.

En el interior de aquel convento Olivia protagonizaría una de esas escenas que se quedan grabadas a fuego en la memoria, con un tronco tallado y un espejo. Además de ser la monja más bella que uno pudiera ser capaz de fantasear. Una mariposa encerrada en un clima de represión angustioso y obsceno.

La memoria es caprichosa y en mi caso lo es mucho con las fisonomías. Reencontré a la actriz alemana en Vanessa (1977), otra película para adultos con la adolescente envuelta en un decorado pretendidamente exótico. Contemplarla es quizás el único aliciente de este drama erótico sobre el despertar sexual que nada tiene de destacable: alguna secuencia que me pareció divertida con maniquíes dorados y un espejo, y poco más. Si les apetece verla les diré que Olivia está más linda que nunca (tenía entonces nuestra niña 20 años).

A partir de Vanessa empecé a buscar todas sus películas: alguna comedia sobre un par de chicas jóvenes de vacaciones, y incluso una explotación de “Vanessa” hecha por el mismo director Hubert Frank (en este caso el invento se llamó “Island of 1000 Delights”). Invariablemente films eróticos para el lucimiento físico de la protagonista, que no tenía reparos en desnudarse siempre que podía.

Mi inclinación hacia su cabellera salvaje y su boca en forma de corazón me llevó incluso a ver entera Bloody Moon (1981) de Jesús Franco, la que en España se llamó “Colegialas Violadas” (no les engañe el título, imposible violar a una estudiante en esta cinta), una de las peores que he visto de Jess, y eso que es un director al que le perdono casi todo por su hechizo.

A partir de los 90 le pierdo la pista a Fräulein Pascal. Sé que tuvo una carrera activa en series de TV alemanas, incluso sacó un disco que no he conseguido localizar… Lo que sé seguro es que ver a Olivia dándose un baño en Vanessa es como contemplar una bella deidad sacada de un lienzo de Courbet:




Actualización:
Como el señor YouTube me censuró el video de Olivia (pobre, ella que sólo se estaba bañando) lo he colgado aquí. A ver lo que dura:


jueves, noviembre 29, 2007

El Ovni de los Colby

Las clásicas telenovelas son un campo de abono idóneo para la expresión de “lo fantástico”. No sólo por el seguimiento de sus líneas argumentales que rozan lo surrealista sino por resoluciones de su trama en las que lo sobrenatural se introduce sin que apenas nos demos cuenta en nuestro universo de sobremesa.

Por ejemplo, no nos basta con ver a uno de los protagonistas morir debido a mordeduras de cocodrilos en zonas geográficas en las que no hay rastro de estos reptiles, no. Aceptamos volver a ver a un personaje que temporadas atrás estaba muerto sin hacernos demasiadas preguntas. ¿Muertos vivientes? Y no sólo eso, sino que un protagonista conocido, un amigo ya de la familia, un buen día se presenta con otra fisonomía muy distinta, digamos, con otro cuerpo, otro rostro, otra voz… y al cabo de unas horas aceptamos su mutación como lo más normal del mundo. Claro, si algunas viejas glorias de las que aparecen en la serie rejuvenecen un buen día una veintena de años, ¿porque no va a haber intercambio de cuerpos?

El ejemplo que me sirve para ilustrar esta divagación es el último episodio de “Los Colby”, spin-off de la famosa “Dinastía” que se introdujo en las pantallas entre el año 85 y el 87. Aunque la producción de Aaron Spelling aguantó dos temporadas, lo cierto es que los niveles de audiencia eran bajísimos y hacia el final de la serie decidieron ir al grano e ir quitándose personajes de encima de la mejor forma posible.

Y el gran acontecimiento sucede en el último episodio. Fallon Carrington Colby, interpretada por Emma Samms, conduce de noche por la carretera. Su vehículo deja de funcionar, la radio empieza a emitir sonidos distorsionados, el teléfono pierde la conexión… Ella sale del coche y ante su asombro un Ovni espectacular baja del cielo para llevársela a otros mundos, con un extraterrestre muy simpático que le hace señas desde el interior.

Así es la soap opera.

miércoles, noviembre 28, 2007

Lil' Markie. Diary of an Unborn Child


Posted by
Lost Driver

Uno, que es por lo general curioso, y más concretamente apasionado del sonido y sus múltiples facetas, no sólo como fenómeno físico o artístico sino también sociológico o cultural, no pudo dejar de asistir a una actividad celebrada en el auditorio del MACBA en el contexto de la onceava edición del festival de música experimental LEM, celebrado este octubre de 2007, como de costumbre, en el barcelonés barrio de Gracia.
La organización corría a cargo del colectivo Alku. Un cordial saludo para ellos.

Se trató de una conferencia que proponía, con el sugerente título de “Less-Lethal: Armes sòniques no letals”, ilustrar acerca de la manipulación del individuo ejercida por medios sonoros. Dado que mi interés en el tema había surgido, primero a través de las perversas reflexiones que presenta Genesis P. Orridge (miembro de la seminal banda de “música industrial para gente industrial” Throbbing Gristle) en su ensayo sobre el muzak como producto de consumo altamente dañino para la sociedad de masas, y más tarde gracias a experiencias cotidianas, esperaba encontrarme con una exposición del fenómeno en estos términos. Sin embargo, no se habló del uso maligno de mensajes subliminales insertados en los hilos musicales de los supermercados o de la relación intrínseca entre las producciones de discos de prístino sonido de mediados de los 70 y el auge del consumo de la heroína.

Las denominadas ‘armas no letales’ en su vertiente sonora, desempeñan su función estos días en las contiendas bélicas o como forma eficaz y atroz de tortura auditiva. El ‘arma sónica’ es arrojada en la zona de conflicto para menguar la capacidad del adversario. Algunos infernales disparadores de ultrasonidos son utilizados por los ejércitos, amparados bajo el poético epígrafe de ‘prototipos en fase experimental’.

No obstante, al igual que los populares ‘educational films’ diseñados para concienciar a la maleable juventud norteamericana de las décadas de los 50 y los 60 sobre una u otra pecaminosa actitud, los discos con ‘mensaje’-dejando de un lado la curiosa práctica del ‘back-masking’- fueron ya ‘armas sónicas’ de pleno derecho cuyo encanto reside en las retorcidas maniobras llevadas a cabo por los productores discográficos de la época. Es el caso de Lil’ Markie, cuyo tema llamado ‘Diary of an unborn child’(1980) es de escucha altamente recomendable para los amantes de las rarezas y todo arqueólogo musical que se precie.

Para empezar, hay que hablar del empleo de un formato tipo ‘spoken word’ combinado con un proceso de transformación de la voz humana en un tema destinado al público ‘mainstream’ y con carácter moralizante –en el terreno del ‘underground’ y lo experimental ya habían surgido varios pioneros de ello-. Una vocecilla dulce, a la vez que aterradora que representa a un feto, nos habla desde el interior del vientre de su madre. Nos es relatado, a modo de diario personal, la evolución de su gestación y sus primeros pensamientos entorno a sus progenitores en un tono tierno, próximo a lo lacrimógeno y que busca conmover al oyente. Un fondo de piano eléctrico edulcorado e idílico sirve de perfecto contrapunto al feliz acontecimiento. Poco a poco vislumbramos el inminente nacimiento hasta que de repente, el feto ‘escribe’ en su diario que su madre “lo ha asesinado”.

Tras el estupor inicial, lo que sigue deja bien atónito: la descripción se convierte entonces en un tema musical interpretado por este niño nonato en el que, atormentado no deja de preguntarse “¿por qué lo hiciste, mami?”.

La improbable cancioncilla finaliza, y con la sangre ya helada somos asaltados por una voz adulta, cristiana y recta, que cita pasajes bíblicos que versan sobre la matanza de los santos inocentes y su profundo significado en nuestra cristiana vida. En resumidas cuentas, nos hemos tragado un ‘single’ anti-aborto como si nada. Fascinante y perverso a partes iguales, nos hallamos frente a un material que destila crueldad y premeditación. Con todo, tengo que confesar que la complejidad de tal operación me induce a ver el asunto desde una óptica humorística no exenta de respeto. Dios nos habla en los vinilos: ¿no era la música pop un invento de Satanás?...

Escuchen:


lunes, noviembre 26, 2007

Carta Póstuma


Estimada Aura,

Me dirijo a usted teniéndola como brillante y gentil muchacha, y valiéndome de su aprecio para encomendarle una importuna tarea. Me preguntaba si podría publicar esta carta después de mi deceso, ya que usted y yo sabemos que ese mal menor puede acaecer en cualquiera de estos días que nos corren.

Porque anticipo yo, que muchos ante mi fallecimiento llevarán carteles con mi efigie recortada de algún periodicucho, y aún otros aprovecharán para vender sus pobres ideas usando mi nombre. Usted ya sabe como son estas cosas, doña Aura, que esperan a que muera uno para exhibirlo en su armario como si se tratase de un abrigo prestado. Como si yo pudiera transmutar sus aguas en vino, o poner huevos de oro. ¡Que escriban sobre sus abuelas! ¡o sobre sus reinas madres!, no de mí, que no me conocen. Y que no se concedan el privilegio de querer tutearme o de darme una importancia para la cual no he hecho méritos.

He trabajado. He conseguido que me dejaran escribir de vez en cuando, y aún hablar para las gradas. Pero que no me coloquen las barbas en sus tabernillas, que no me alaben de saetas. Sólo he sido lo que ve. El estudiante, el boticario, el joven militar y aún, alguna vez que otra, el cura.

Que no me manteen, doña Aura, que no me manteen. Que los cartones para tapices de Goya me quedan muy lejos. Y si me quieren dedicar algunas líneas y ponerse mi foto, que hablen al menos de aquel caballo

Con afecto,

Fernando Fernán Gómez.


viernes, noviembre 23, 2007

El Alboroto y el Éxtasis

Te espero como la colegiala que aguarda que le levanten el castigo. Ese acariciar el pelo y revolverlo cariñosamente. Te espero al final de la fila.

Los Brutos y los Locos ríen, danzan en el cementerio. Y yo imito sus voces para pedirte, vehemente. Concédeme el deseo, concédeme todas las gracias, para agasajarte.

Escribo en cualquier parte. Corriendo de una pared a otra con las letras de tu nombre apareciéndose ante mí. En los muros de la cripta redonda. En el tejado de la casa sin puertas ni ventanas. Mientras me dejen escribir.

Retumban los silencios. Tiembla la tierra cuando tus labios se posan en mi frente. Alzan el vuelo las golondrinas. Se oscurece el agua y cambia de sentido. Se revuelven tras las jaulas. Ábreles la puerta. Deja salir a las fieras.

He conocido el fuego. Y ahora no puedo vivir sin las llamas.

Píntalo todo de rojo.


miércoles, noviembre 21, 2007

Encuentro de los 3 Vivos y los 3 Muertos

3vivimorti1

En el Medievo la Muerte, el terror por excelencia, se viste y sale a las calles, incluso habla con quienes se cruzan en su camino. La Muerte se personifica: se disfraza para parecerse a los mortales, y engañándolos, les muestra de pronto los horrores de la putrefacción de la carne. Todos se hacen iguales ante su baile, ante su carcajada escandalosa.

Como tema iconográfico en las artes figurativas, se desarrolla en múltiples variantes que recuerdan al hombre el final horrible que le espera y la caducidad de la juventud y de los placeres terrenales, pienso en el Triunfo de la Muerte, en las “Danzas Macabras”.

Pero hay una variante que me parece curiosa y de la que quizás se habla menos. Se incluiría también en la iconografía de la Muerte, y es el tema del “Encuentro de los tres vivos y de los tres muertos”, que aparece a partir de la segunda mitad del siglo XIII y se extiende aproximadamente hasta el siglo XV.

El tema representa a tres jóvenes durante una cacería que en el transcurso de su cabalgada se encuentran con tres muertos vivientes que les detienen para hacerles una admonición: “Esto que ahora somos lo seréis vosotros mañana”. El tema está extraído de una obra francesa del siglo XIII, “Dict des trois morts et des trois vifs” de Baudouin de Condé.

Todos somos así de guapos.

lunes, noviembre 19, 2007

La Corona Negra (1951)

Con esta frase de Jean Cocteau en los títulos de crédito se inicia esta película del realizador argentino Luis de Saslavsky, apuntando un par de ideas. En primer lugar, la presencia de Cocteau, quien escribió la historia adaptando una obra de Charles de Peyret-Chappuis (por cierto, Saslavsky contó también con la colaboración de Miguel Mihura para traducir los diálogos al castellano). Por otro lado, la introducción de las aves como leitmotiv de la obra: las aves carroñeras, pero también las palomas, que convergen ambas en la figura enigmática de la mujer de negro, María Félix o “María Bonita” como era también conocida la estrella mexicana.


La Corona Negra” es un drama basado en un misterio, y como tal, se inicia sumiendo al espectador en el desconcierto: imágenes de las dunas de un desierto, el rostro de María Félix (Mara) recortado contra el cielo, manos que surgen de la arena implorando a la protagonista… Todo un paisaje surrealista que se va a ir repitiendo a lo largo de la película en escenas de flashbacks o visiones oníricas.

La viuda negra… “esa mujer trae la muerte” dicen las cartas de la adivina, un cementerio, un crimen... Ideas esbozadas que vamos descubriendo al mismo tiempo que Mara, que padece amnesia y anda perdida por las calles de Tánger. Sus ojos extraviados buscan el olvido, la evasión de su propia identidad. Y el destino y sus aliados le tienden trampas por doquier.

La corona negra” desprende el perfume de Cocteau en cada escena: sus símbolos inmediatos, el baile con la muerte, cierta superstición romántica, y un exotismo de bambalinas. Los personajes son esculturas poseídas por pasiones impetuosas, los escenarios protagonistas de la tragedia y cada detalle se borda en espiral para acabar formando la efigie de la muerte. Como en las obras de Tennessee Williams se podría hablar de un gótico sentimental en toda creación tocada por la mano del mago francés.

La Corona Negra no es sólo el dedo que señala la carne que acaba de sucumbir, sino que es también el presagio de que la muerte anda cerca.

jueves, noviembre 15, 2007

Album Familiar

Portada de “El Padre Abraham y los Wuppies

¿De donde procede el miedo?

1. Esa sonrisa… sin lugar a dudas es la sonrisa de la venganza. Hecho éste que me hace preguntarme, ¿quiénes son en realidad los Wuppies?

2. La barba. ¿Qué lleva teñido el pelo o la barba? ¿Un postizo?

3. Es que en esta imagen todo son incógnitas, ¿por qué "padre" Abraham? ¿es el fundador de un nuevo credo? ¿los Wuppies no visten sombrero hongo?

Y sí, les conozco, sé que pese a todo quieren saber como suena el disco… y yo les consiento. (Que terrible verdad se esconde aquí: hay Pitufos en el interior de los Wuppies).


martes, noviembre 13, 2007

Gusto

Recibo carta con remite de mi querido Higronauta en la que me nomina (aplausos) a “Blog del día”. Entiendo que, dentro de esta cadena, debo listar siete de los blogs que disfruto habitualmente e insuflar un poco de ánimo a sus redactores, y, como es justo corresponder con bondad y reverencias a mis incondicionales, me he puesto a ello con amorosa diligencia.

Alimentar un blog y mantenerlo saludable es complejo. Muchos no entienden nada de lo que dices pero se obstinan en leerte, otros leen las dos primeras frases y ejerciendo de adivinos se permiten inventar el final de tu escrito y comentar en base a su ego (que son más de los que parecen), otros siguen tu blog porque lo han visto en alguna lista y pretenden que les gusta, aunque no saben porqué. Y por fin están quienes “leen”, quienes leen de verdad y se dejan leer. Estos son mis favoritos, aunque los otros me divierten de tanto en tanto.

Pues bien, como se trata de coronar cabezas, continúo listando mis elegidos:

Días del futuro pasado. El Brujo lleva conmigo casi desde que inicié este blog y es un acontecimiento diario entrar en su página y consultar sus artículos, siempre aderezados con su particular sentido del humor y protagonizados muy a menudo por mujeres singulares y mundos exóticos. Tras cada uno de sus escritos intuyo siempre una opción crítica y un modo muy marcado. Gracias por seguir aquí Brujo.

La Cinta De Moebius. Sigo esta página desde hace relativamente poco tiempo, pero sus reseñas cinematográficas y musicales tienen alma y se dejan leer sin convertirse ni mucho menos en un tostón. Además de su personal percepción de su cine favorito, el Crononauta suele acompañar los textos de anécdotas muy entretenidas.

El Diario Lírico de Nicho. Un señor que se hace llamar Nicho por fuerza me crea una identificación mental y afectiva. Pero no es sólo eso, es que además vive en el año 2067, escribe sobre cómo se corta las uñas, sobre Umbral o sobre su coche demodé saltando de un tema a otro con una soltura brutal. Siempre lírico.

Imbécil y Desnudo. Aunque me suele exasperar y encandilar a partes iguales es de justos incluirle porque le sigo fielmente y devoro sus frases en busca de aquella exaltación extraña que me deslumbre. Incluso, a veces, le comprendo más de lo que me gustaría y vislumbro pedazos de una tierra mítica en sus diversiones desordenadas.

El Gabinete del Dr. Zito. El Dr. Zito es un amor y todo el mundo debería leerle.

Mal. Sus dibujos me ponen los ojos como platos y sus refrescantes textos me hacen sonreír cada dos líneas. Un niño que dibuja y suelta verdades como quien explica un cuento. Además es alegre (los blogs de crítica por mucha sátira que fuercen me aburren soberanamente).

Ars Secreta. Lo he descubierto recientemente y ha resultado todo un hallazgo, como una fantasía hecha realidad: un blog que trata sobre ocultismo y simbología en el arte; tema que me obsesiona desde mi adolescencia. Comparto filias con el autor que, al parecer, también es historiador del arte.

Y... c’est Fini. Si desean continuar los festejos lo dejo de su mano (sonrisa).

lunes, noviembre 12, 2007

WHITE NOISE - An electric storm (Island, 1969)

Es Lunes, principio de semana, y aprovecho para introducirles un nuevo colaborador que, al igual que monsieur Kinky con su sección, emprenderá un análisis de algunos álbumes favoritos de la arqueología musical. No les puedo dar mejores referencias de Lost Driver diciéndoles que además de ser miembro de uno de mis grupos favoritos, compartimos gustos musicales casi en un 95%. Como un dúo de buscadores de sonidos oscuros, avanzamos por pasadizos subterráneos en busca de la melodía que nos alcance y nos cace con sus poderes nigromantes. No se trata de música, sino del hallazgo de tesoros: de monstruos que resuciten nuestros sentidos y los confundan unos con otros.

Dicho esto, les avanzo que cuando escuché por recomendación de Lost Driver “An Electric Stormlo primero que pensé es que me había equivocado, que el disco que tenía entre mis manos no podía ser aquel de 1969 del que me había hablado mio caro. Era imposible, aquellos sonidos… ¿de dónde salían?

Posted by




David Vorhaus, Delia Derbyshire y Brian Hodgson, fueron los responsables, casi sin saberlo, (cómo bien suele suceder en estos casos de músicas experimentales) de una obra clave para entender mucho acerca de la música de hoy en día. No solamente experimentaron, antes que muchos otros, con nuevas estructuras rítmicas, planos sonoros narrativos, instrumentos inexistentes creados a partir de cintas, (apenas usan un solo sinte, el EMS VCS3) sino que también introdujeron nuevos conceptos de lo que un álbum de psicodelia había sido hasta la fecha.

"An electric storm", hay que escucharlo básicamente con una mente lo más abierta posible y dejar el habitáculo donde nos hallemos para iniciar un auténtico viaje por el sonido, las texturas, las frases que llegan directamente a nuestro cerebro, y dejarse sorprender por algo que si todavía hoy nos parece novedoso y casi podría pasar por actual, imagínense en el 1969.

Me vienen a la memoria, por citar algunos ejemplos de los últimos tiempos, cosas de Broadcast, los Radiohead del “Kid A” y “Amnesiac”, e incluso sus coetáneos sixties The United States of America, sólo que White Noise es más un organismo que una banda. Y es que resulta difícil pensar en seres terrenales conforme se van sucediendo las diferentes melodías, abstracciones y, literalmente, sensaciones que desgrana este (injustamente) olvidado clásico.

Gracias a Víctor por descubrírmelos, y a estos días de reediciones en los que uno, si ata cabos, cae en la cuenta de que el reloj estaba pasando de nuevo por el mismo sitio.


DivShare File - White Noise.rar

viernes, noviembre 09, 2007

Historias de mi Vida

Como explica Jean Marais, en su evocadora autobiografía de tono infantil “Historias de mi vida”, cuando vivía con Jean Cocteau en el 19 de la place de la Madeleine muchas noches el mago francés deslizaba por debajo de la puerta que separaba sus habitaciones poemas.

Al despertar, Marais encontraba en el suelo una o varias hojas de colores, plegadas con formas diferentes, a veces en forma de estrellas… Imagino que nada más abrir los ojos la costumbre le llevaría a mirar aquel lugar predilecto donde los regalos se debían amontonar. Y su primera ocupación del día sería leer aquellas preciosas cartas:

GRACIAS

Pensaba: he vivido la mitad de mi vida
No tengo más ganas de vivir.

Llegaste de aquel mundo desconocido de donde salías
(de allí me llegaste)
De aquel mundo enigmático donde viven los demás
Los indiferentes y los nuestros

Salías del destino que forma su misterio
Con los secretos de la tierra

De allí llegaste a mis sentidos descontentos
Como los pólenes de la primavera

Me llegaste, Jeannot, como un polvo de árbol
Como quien encuentra un Eros de mármol

Poco a poco fui sabiendo, reconociéndote
Y comprendí que nacía

VUELTA AL MUNDO

Decir que a todos los países
Que no hemos visto juntos
Los desprecio, los odio
Salvo en lo que a ti se parecen.

Cuerpos alados, árboles de rizos de oro
Un hombro, un bosque rubio,
Sólo amo de esta vuelta al mundo
Los pálidos reflejos de mi pequeño durmiendo.

Y luego están estas cuatro líneas. Tengo que confesarles que las reescribí, en una hoja de color naranja, y que las llevo siempre conmigo, dobladas, como una especie de amuleto. Son los versos más hermosos que he leído nunca, y no por sus cualidades literarias, sino por ser VERDAD. Un momento de VERDAD congelada que llega a mis manos y a mis labios abrasándome:

La vuelta al mundo es un pobre viaje
Al lado del viaje que me lleva contigo
Cada día te adoro mejor y más
Donde tú vives es mi techo.

Gracias” es el título del primer poemilla que he trascrito. Y no es casual. No sé si recuerdan aquella fotografía en la que fui fantasma. Ya no lo siento así. Cocteau es uno de esos pocos genios que te coge de la mano y te sube con él a la escalera de Jacob. Yo soy Cocteau, y soy Marais, y soy su obra, cada una de sus obras. No puede ser de otra manera. El ángel francés lo ha querido así. Se ha abierto en canal, me ha mostrado sus vísceras, su interior de algodón y sangre, y me ha nutrido. Este tipo de vivencias los he sentido en contadas ocasiones, pocos se crucifican de este modo, con paciencia infinita, sin temor, con una sonrisa. Cocteau te pone el espejo delante y te dice: este eres tú, soy yo, déjate ser, yo te dejo verme.

Y eso no se olvida.

Quisiera llegar a eso algún día...

miércoles, noviembre 07, 2007

6 Herbie Possible Ruido ¿Quién?

6 de Noviembre

Son las siete y veinte de la tarde. Muy a menudo al escribir interrogo al reloj y me da parámetros parecidos, ¿será esta hora como un sortilegio?

Acaricio unas hojas con dibujos de farolillos chinos, muerdo los lápices, juego a recortar mi silueta y pruebo la opción de no ser. Mais n'est pas possible. Je suis…

Sono pazza… di sentirmi così.

¿Quién hay? Me ha parecido oír una voz a mi espalda. Mientras, el falso peregrino intenta comunicarse conmigo, pero estoy lejos, dominada por los caprichos de mis dedos. Io non faccio niente.

Escribo, ¿pero qué escribo? Durante unos segundos parece que se asoma alguien a la página en blanco, pero no, nadie. Así que me decanto por lo peor, que es tenderme sobre la alfombra de mantas y cerrar los ojos mientras paladeo las miríadas de sensaciones que me recorren en calambres: desde el hueso del tobillo hasta la punta de la nariz, y que me transportan en tibias mareas.

¿Vienes? Vas y vienes supongo. Yo me rodeo de animales imaginarios y de chillidos y cantos. Invocaciones. Y me dejo ser, una vez más.

¿Han oído algo?


lunes, noviembre 05, 2007

I Lunghi Capelli Della Morte (1964)

La muerte, de largos cabellos, es la presencia omnipresente de la séptima película de Antonio Margheriti como director. “I Lunghi capelli della morte” comparte año de realización con “Danza Macabra” en la que Margheriti utiliza también el expresivo blanco y negro, y ambas tienen en común la presencia turbadora de Barbara Steel.

La muerte, verdadera protagonista, aparece en los pálidos rostros de las hermanas Karnstein (apellido tomado de “Carmilla” de Le Fanu). La muerte está también en la figura de trapo, cubierta de cabellos, que arde en una pira al final de la película de forma simbólica, para acabar con la peste. La muerte está en la copa de veneno, en los amores impetuosos, violentos, y sobre todo, en los cabellos negros, verdadero leitmotiv de la historia.

I Lunghi Capelli Della Morte” es una magnífica expresión del horror gótico. Con una sugestiva ambientación medieval que evoca la imaginería de los “Trionfi della Morte” es una película paradigmática, ejemplo de cómo se desarrolló lo gótico de la novela decimonónica al cine. Existe ese interés en provocar en el espectador el sentimiento estético del terror a partir de la barbarie del alma humana. En este drama no hay personajes positivos y tanto los sádicos aristócratas como las bellas Némesis danzan por igual alrededor de la Muerte, que todo lo enreda en sus cabellos.

Para ilustrar este juego del escondite entre los pobres mortales y la Dama de Negro, el castillo se alza como presencia todopoderosa. Hay pasadizos ocultos en su interior, que llevan a las catacumbas, un laberinto en el jardín que acoge una sepultura y multitud de escaleras que conducen en trayecto circular a la locura.

Sólo el fuego purificador puede acabar con las pasiones desatadas y restaurar el orden. Por un tiempo. Hasta que la Muerte se vuelva a levantar de su tumba para ejercer su dominio.