

Aquí tenemos una colección de canciones que debería haber sido éxito en su tiempo. Grupos oscuros, con regusto por lo exótico e incluso lo esotérico. Aires latinos, flautas traveseras, punzantes guitarras, omnipresentes órganos, y en muchos casos idiomas inusuales para el pop, de grupos procedentes de sitios tan dispares como
La portada de esta antología es ya de por sí atractiva, con ese cartel de película que seguro haría las delicias de la autora de este blog.
Y las bandas, como dije antes, oscuras. Sacadas de discos a buen seguro conseguidos en mercadillos de segunda mano; también me imagino esos melenudos coleccionistas rastreando en las colecciones de sus padres... Curiosidades como el tema de “Manolo y Ramón”, sí, los del “Dúo Dinámico”, que como absolutamente todo el mundo en aquella época tuvieron su disco psicodélico, grabado en Gran Bretaña: una joyita con arreglos orquestales y coros lisérgicos, y al parecer la colaboración de Jimmy Page e Ian Anderson (para los no iniciados, miembros de Led Zeppelin y Jethro Tull respectivamente, y el primero de ellos un recurrente músico de sesión en toda la década de los sesenta).
Para mi la joya de la corona de la selección musical viene a cargo de "Katy Kovacs" y su Wind, Komm, Den Regen Ben un pedazo de Freakbeat Monster que te deja noqueado con ese vozarrón que a mi me recuerda mucho a la cantante de los “Shocking Blue”, eso sí, muy cabreada...
También tremendo “Tony Ritchie” con su Could You Live Really Live Without Her, esa historia de desamor (de las que a mi me gustan...) con arreglos barrocos, y una onda muy Blue Eyed Soul.
Estupendos también los misteriosos “Roundhouse” cantando una cosa llamada Alchemy Is good for You. Yo por si acaso tomo nota...
Y por último a destacar, aunque todo el disco es una joya de principio a fin, los quizá más conocidos “Birth Control” con un What's Your Name que te deja sin aliento, antes de convertirse en unos de los abanderados del rollito Kraut Rock (en su vertiente más guitarrera y macarra)
Y así hasta 22 temas que, como he dicho, no tienen desperdicio.
Un no parar, temas que han sonado en su mayoría últimamente en allnighters de índole psicodélica y freakbeatera y que servidor ha bailado en más de una ocasión haciendo muchos aspavientos.
Sí señor, ¡a bailarrr!